domingo, 1 de noviembre de 2009

TUVE UNA PESADILLA: SOÑÉ CON MI EX




Soñé con mi ex marido, Dios! eso sí que es tener pesadilla! Encima lo soñé con su mujer actual y yo como una tonta preguntándole si todavía me quería. Por favor! No se puede ser tan pero tan tonta! Y lo peor es que se está transformando en un sueño recurrente, porque desde que me enteré que tiene otra mujer, hace dos años, demasiado seguido sueño con él, pero ahora encima se me sumó la fulana!! No es demasiado para una sola noche, con todas las cosas hermosas que podía soñar y las personas con quien quisiera hacerlo. En fin, que fue una noche desperdiciada y arruinada oníricamente hablando.


El análisis de este sueño? Qué me está diciendo mi subconsciente en este sueño? Sí, ya lo sé que no puedo superar mi separación y menos aún que él haya formado nueva pareja.


Lo raro, por lo menos para mí que no soy psicóloga, es que concientemente no me interesa más, no lo quiero, estoy mejor así, sin él a mi lado y hasta que supe que formó nueva pareja todo estaba bien entre nosotros. Venía a casa a ver a nuestra hija y conversábamos como viejos amigos. Hasta llegó a quedarse durante días, porque vive lejos, en un cuarto de huéspedes que tengo en el fondo de mi casa. Estaba todo bien hasta que supe de la existencia de su mujer. Allí comenzó no sólo mi sorpresa porque me había engañado hasta separados, porque ya vivía con ella mientras venía a visitar a nuestra hija y me decía que estaba solo, sino también mi indignación por sus recurrentes mentiras.


Es un mitómano, me mintió desde que noviábamos y lo hizo sistemáticamente durante muchos años, años en los que yo me daba cuenta pero había factores que impedían la separación. Hasta que un día al fin nos separamos.


Todo este tema me hizo mucho mal, pero pude superarlo bastante, salvo que hoy estoy con este tema de los sueños con él y su mujer que me amargan el día siguiente a soñarlos.


Creo que comenzaré terapia y lo haré un tiempo para sacarme a este hombre de la cabeza para siempre, aunque teniendo hijos en común es casi imposible. Pero tengo que lograr verlo exclusivamente como el padre de mis hijas a quien tendré que aguantar ver de vez en cuando hasta el día de mi muerte y no como el hombre con el que un día muy jovencita y llena de ilusiones me casé.


Quizás haber contado aquí esta interpretación que yo hago de mi pesadilla marital logre ayudarme a que mi subconsciente se libere de este terrible flagelo que se llama Tito.


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